Aún no siento que la terapia me esté ayudando, pero igual seré persistente en esta y en otras vías pues me cuesta resignarme a quedarme postrado en mi situación.
Hoy es 31 de Octubre y la ciudad está de fiesta. Yo no. Yo estoy con dolor de cabeza y sueño, con tristeza y soledad aquí en mi departamento (que ni siquiera es mío).
Me siento un marginal, no quiero, de verdad que no quiero seguir viviendo así.
Aún tengo esperanzas.
domingo, 31 de octubre de 2010
Suscribirse a:
Entradas (Atom)